Se me fue la flapa la semana pasada y no publiqué nada.
–Peter Rocker me avisó –explicó el faux sureño–. Me dijo que, si alguien se cargaba mi operación antes de que estuviese en marcha, sería usted, señor Bullitt.
Seguir leyendo «El caso de los libros, parte 18»
Una vez había hecho mi trabajo, lo único que quedaba por solucionar era encontrar a los aparentes jefes de este círculo de tráfico de grimorios.
Seguir leyendo «El caso de los libros, parte 17»
Para cuando llegué al edificio de la señorita Colette, ya había sirenas de policía partiendo el firmamento con sus estridentes berridos.
Seguir leyendo «El caso de los libros, parte 16»
Bajó del avión agarrotada y con las piernas al rojo vivo. Tendría que haber pagado extra para ir en business. Obviamente, a la vuelta, lo iba a pagar. No quería dejarse las piernas en el avión. Y quería comer comida de verdad, no plástico barato.
Seguir leyendo «El sombrero, 3»
El apartamento de Anna estaba totalmente desordenado. Lo único que parecía marginalmente comprensible (tras una generosa dosis de sustancias psicotrópicas) era la mesa de la muchacha.
Seguir leyendo «El sombrero, 2»
El batería se movía demasiado rápido para los ojos de Matt. Para cuando se oía el plato, la baqueta del hombre ya estaba golpeando la caja. Matt frunció el ceño y pensó un rato en lo que pudo haber sido.
Seguir leyendo «El miembro fantasma, 1 (El accidente)»
Este relato fue idea de unos compañeros de facultad. Al principio no sabía qué hacer. Pude montar algo, afortunadamente, así que, por eso, hoy hay relato.
Seguir leyendo «Conversación»
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