Acerca

Quiero dejar claro que el objetivo del blog no es más que el de entretener, si algún comentario resultase ofensivo es de manera completamente inintencionada. No busco la mofa de ninguna opinión, creencia, cultura…

Todos los personajes aquí representados son producto de mi imaginación o caricaturas de personas que han dado su visto bueno. Si algún personaje guardase cualquier similitud con cualquier persona viva o muerta que no haya aprobado ser representada en este blog es mera coincidencia.

Bitácora del internetófilo. Día 2

«Me levanté tranquilo, pensando que ya tendríamos internet. Desayuné tranquilo, pasée a los perros, vi un poco «Phineas y Ferb» y, finalmente, me acerqué al ordenador, a actualizar mi blog y escribir un par de tonterías en el de un amigo. Tenía pensado hablar del supuesto fin del mundo y cosas por el estilo. Abrí el ordenador, esperé pacientemente a que se encendiese (Sólo quemé un libro, en lugar de los tres habituales, eso es paciencia ¿no?). Nada más saltar el aviso de que estaba (finalmente) encendido abrí Google Chrome®. Ante mi se desplegaron quince pestañas, todas «recicladas» de la sesión anterior. Seguir leyendo «Bitácora del internetófilo. Día 2»

Soul

Sus miradas se cruzaron. El agente se acercó al encapuchado. Éste último veía como los labios del policía se movían, pero no llegaba sonido alguno a sus oídos. Si lo conseguía su maestra se enorgullecería y si no, mala suerte. El oficial estaba a su lado. El joven se retiró la capucha y dejó que su melena gris acero cayese sobre sus hombros, sonrió y se dejó caer de espaldas. Seguir leyendo «Soul»

Bitácora del internetófilo. Explicación y día 1

Esta sección se basa en una historia por entregas de Gladstone (Columnista de la página web americana Cracked). En ésta, Gladstone, explica como, tras la desaparición del internet, cambian las vidas de gente enganchada al internet (o, como plantea un compañero mío, Dios, pues lo sabe todo y está en todas partes (Esta idea fue seguida por una sonora carcajada en medio de clase)) Llega a dividir a la gente que ligaba por internet en distintas clases. Os doy los links de las dos entradas que ha hecho hasta ahora:

Primera entrada

Segunda entrada Seguir leyendo «Bitácora del internetófilo. Explicación y día 1»

Grand City II

Aún así eso no le consolaba, no podría comer nada. Decidió dejar de preocuparse y llegó a lo alto de la pasarela.

El barco al que subió era grande. Tendría una superficie de  unos tres o cuatro mil metros cuadrados. Había un pequeño edificio a unos treinta metros de él. Tenía un enorme cartel encima. Estaba vacío. «Como mi cartera», pensó Louis. Seguir leyendo «Grand City II»